lunes, 8 de marzo de 2010

Fisioterapia en la oficina


¿Cómo podemos disfrutar más de nuestro trabajo
y rendir mejor?

Estrategias de Fisioterapia en la Oficina, que te ayudarán a mover el cuerpo, evitar las malas posturas y los dolores y estar más relajada y cómoda para encarar las actividades laborales en forma efectiva y saludable.


La vida cotidiana en el trabajo nos hace estar muchas horas en una misma posición, lo cual conlleva dolores musculares, contracturas y cansancio extremo.

Es un mito eso de “trabajar 15 horas sin descanso”.
Ningún ser humano puede llevar ese ritmo y estar saludable.

Sí podemos trabajar muchas horas pero debemos tomarnos pequeños descansos de 10 o 15 minutos para movernos, elongar los músculos, ejercitarnos, reposicionarnos y respirar profundamente, para así retomar la actividad cargados de energía.

El secreto de ser productivo es sentirse bien con uno mismo y con lo que se hace.
Para eso se ha diseñado la Fisioterapia en la oficina, que consiste en una serie de ejercicios sencillos y fáciles de realizar, que todas las personas pueden hacer en una pausa del trabajo.

En Estado Unidos y Europa ésta ya es una práctica común para las grandes empresas, las que han constatado cómo la productividad de su personal aumenta en razón de su bienestar. Porque es sabido que cuando uno se siente bien trabaja mejor. Tómate unos minutos y comprueba las bondades de ésta técnica

Todos sabemos de la importancia de movernos y ejercitarnos, pero, inmersos en las actividades cotidianas y laborales, no siempre encontramos el momento o la forma de trabajar nuestro cuerpo; el ejercicio puede llegar a ser la clave que te ayude a lograr tus metas anheladas, te hará liberar endorfinas, unas hormonas que hacen sentir muy bien a todo el cuerpo.

Las mujeres principalmente (pero no exclusivamente) sufrimos problemas en el retorno venoso luego de estar muchas horas en una misma posición (ya sea parada o sentada), lo cual nos da como resultado piernas cansadas, pies edematizados y problemas vasculares como las várices. Aquí encontrarás la fórmula para combatir esa molestia y lucir unas piernas más firmes y sanas

Estos sencillos consejos te ayudarán…
Ejercicios para el cuello
• Tomar la cabeza con ambas manos, inspirar profundamente y, al espirar, realizar una elongación de los músculos de la nuca.
• Con la mano derecha, tomar la cabeza del lado izquierdo y estirarla hacia la derecha elongando los músculos laterales del cuello; luego al otro lado.
• Llevar la oreja derecha hacia el hombro derecho, luego hacia el otro lado.
• Mirar hacia un lado sobre el hombro y luego, suavemente, hacia el otro lado, para elongar los músculos laterales.

Ejercicios para hombros
• Elevar y bajar los hombros simultáneamente, luego en forma alternada.
• Realizar círculos con los hombros hacia atrás y luego hacia delante.

Ejercicios para brazos
• Elevar ambos brazos y estirarlos hacia arriba, como para desperezarse; luego, entrelazar los dedos y estirarlos aún más; a continuación, (elevar los brazos) hacia un costado y luego hacia el otro lado.
• Elongar un hombro pasando hacia un lado el brazo extendido por delante del pecho, con la palma para arriba mientras la otra mano se la estira en dirección al tronco, luego cambiar al otro lado.
• Elongar tríceps llevando un codo hacia arriba y la mano hacia la espalda, con la otra mano empujar el codo elevado hacia atrás, después cambiar al otro lado.
• Juntar las manos por detrás de la espalda, extender los codos y subirlas hasta donde se pueda.
• Ubicar ambas manos en los hombros y dibujar círculos con los codos.
• Brazos extendidos horizontalmente, trazar círculos con las manos.

Elongar el tronco
• Sentado en la silla, rotar el tronco hacia un lado, mantener la posición 10 segundos y luego hacia el otro lado.
• Levantar un brazo bien alto mientras el otro queda abajo, elongando así el costado del tronco.
• Pararse, apoyar las manos sobre el escritorio y separándose lo más posible de él, flexionar el tronco con las piernas bien extendidas, para elongar toda la espalda y los brazos.

Ejercicios para las piernas

• Sentado en la silla, levantar una rodilla 10 veces y luego la otra.
• Realizar flexo-extensión de los tobillos, luego dibujar círculos con los tobillos hacia un lado y luego hacia el otro.
• Sentado, piernas extendidas, separar y cruzar las piernas.
• Sentado en la punta de la silla, ponerse de costado, flexionar una pierna hacia adelante y la otra extenderla hacia atrás para elongar los flexores de cadera.
• Parado, apoyar las manos en el escritorio, pararse en puntas de pie 10 veces y luego en los talones 10 veces.

Se puede concluir masajeando en forma circular la zona alta de la espalda (trapecio) y las manos.